lunes, 5 de marzo de 2012

Cerca o lejos que más da.


Las putadas hacia otro siempre se terminan pagando; saben amargas y salen caras.
Te tengo en el punto de mira, la lista negra y en el lado frío del corazón.
Soy de las que piensa que el tiempo pone a cada uno en su lugar, pero esta vez quiero darle un empujón;me disté tantos golpes donde más duele...
Que yo valgo más que tú y todas esas furcias, que no soy un trofeo pa' exhibir; que era lo que tú querías.
Mejor con mi perro que contigo, chico.
Aún con todo te sigo extrañando a veces; más bien diría que extraño a las sensaciones contigo, nadie con un sano juicio lo haría, pero ya sabes... nunca estuve del todo cuerda.
Ya no quiero que invadas el lado derecho de mi cama, estremecer en tu pecho o que me beses el cuello, sólo... quiero que se me vayan las arcadas y deje de arderme el estómago del corazón por todo lo que no fuí capaz de decirte.
A veces me sacaría los ojos por haber estado tan ciega, luego pienso en todos los hijos de puta que quedan y se me pasa.
Hay dolores que nada los quita por mucho tiempo que pase y así es este, dentro de unos meses un año y aquí sigue.
Inviernos constantes con días de otoño ocasionales, diría que con alguno de primavera también. Es lo que me salva; que la rutina se rompa.
Sé que hay alguien ahí fuera, cerca o lejos, para compartir la vida y sé que todo lo bueno tarda en llegar. Ese es mi consuelo.

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