Me regaló unos nuevos ojos en los que espero poder mirarme porque confío que no me mentirían. También dos nuevas manos que agarro cuando me siento algo inestable y un pecho que me muero por usar de almohada.
Un viaje a Sevilla, un nuevo mes en la lista de favoritos, un montón de coincidencias que ya llevaba grabadas en la piel antes de encontrarme con esta suerte.
Una playlist de canciones que no sabía que me gustaban tanto hasta que me las enseñó él.
Cuando ya no buscaba nada, cuando caminaba sola...Nos encontramos en ese mismo instante y ojalá tenerle en todos los que vengan.
De repente apareciste siendo luz, siendo tan tú.
Ojalá quedarnos.